Odio todo a lo que de mí se refiere, me impaciento por mis
hijos de putas demonios que entran y salen de mi cabeza, mantengo alterado y
malgeniado por cualquier cosa que ocurre a mi alrededor, lloro consistentemente
pensando que hago con nuestra relación, me duele saber que jodo paulatinamente
tu vida, aunque te amé, queriendo con todas mis fuerzas estar contigo, no puedo
soportar la idea que no eres feliz con
este maldito loco, no te juzgo ni lo pienso hacer, pero entiendo que un
malpario como yo no puede hacer feliz a nadie, me destroza el alma que otra
persona si te pueda valorar lo grandiosa que eres, la impotencia se acerca como
un enemigo esperando hacerme daño, juega con mi mente haciéndome sentir como una
basura por no poder controlar lo que soy, me arrodillo rezándole al dios todo poderoso,
reprochando, porque no soy como los demás?, porque no soy normal?, el llanto
ataca más fuerte dándole puerta abierta al inconformismo, asomándose con la
ira, me golpeo varias veces en la cabeza esperando que mi idiotez se desvanezca
y salga algún pensamiento que me genere fe en mi realidad, te quiero demasiado
mi niña, recuerdo tus abrazos, besos, todas esas noches que nos protegíamos del
frió, felices por estar brazados ya que ninguno
antes de la relación le gustaba dormirse con alguien al lado, me
encantan tus gestos como si fueras una niña chiquita, me emboba tu cuerpo y
cara, soy feliz por tener una pareja tan juiciosa, pero como es normal en mi
vida, la dicótomia aparece, vuelven mis pensamientos parásitos acorralando a
mis buenas energías, haciéndome ver que me la paso jodiendo tu vida, te la
pasas pendiente si estoy o no estoy mal, generando una breve confusión e
impotencia la cual no tienes, ni debes pasar, en los momentos más difíciles de
mi vida que son constantes, siempre estas tratando de ayudar volviendo tu zona
de confort en una campo de batalla, sufro viendo bajar tus lágrimas en esa piel
suave, me retuerzo internamente de dolor
y frustración por escucharte al teléfono con una voz entre cortada y de melancolía,
no soy capaz de verte llorar una vez más por mí, te agradezco por todo lo que me
diste, me disculpo por herirte y por joder más tu vida en este inicio de finalización
de este ciclo, siempre vas hacer mi mujer ideal, pero no puedo dejar que
aguantes un golpe más. Gracias. EL AMOR ES SUPERAR LOS PROBLEMAS, NO QUEDARSE EN
ELLOS Y YO SOY UN PROBLEMA ANDANTE SIN CORRECCIÓN, NI RUMBO FIJO. GRACIAS TE AMO.
Discurso de un joven de veintisiete años con trastornos
mentales hacia su futura exnovia.
SI LES GUSTAN LOS ESCRITO POR FAVOR DIFUNDAN..... MUCHAS GRACIAS.....
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