No aguanto estar en mi propio hogar, los enfrentamientos cada día son mas fuertes, soy un hombre de veintinueve años que es impulsivo pero nunca he sido violento, llego a mi casa a las siete y media de la noche, como de costumbre mi mujer me recibe por que ella llega una hora antes que yo del trabajo, me saluda seca y tosca, me da la comida como si fuera un desconocido, se sienta al lado mio, me mira mientras me dice, a usted que le pasa Mario, hoy me han vuelto a llamar cuatro veces la perra hija de puta de su moza, a usted le parece eso bonito, la miro sin rechistar ninguna palabra, me da una cachetada mientras contiene las lagrimas, sin percatarme coge mi plato de comida estrellándolo en mi cabeza, me levanto maldiciendo sin mirarla a la cara, ya que en esos momentos que no son nuevos en nuestra relación prefiero no verla para no cometer alguna brutalidad, estando espalda a ella me grita, vaya que le cocine esa malparida, usted es un desgraciado, nunca la ha negado, le respondo, cuando la he aceptado?, casi ocho años de casado y nunca haz tenido ningún problema de estos y hace tres meses que alguna culicagada sin oficio te atormenta le crees mas a esa desconocida que a mi, te he dicho que yo nunca te he engañado, ademas ya me has golpeado, tirado la comida, mechoniado mas de diez veces en dos meses, mírate como te has vuelto, sin mencionar que hace mas de ocho meses que ni me tocas, sera que en ves de mi tu eres la que tiene otro hombre, no sera solo proyección, me responde levantándose de la silla y tirándola, claro ahora viene hacerse la victima, para eso si es bueno el bebe, camino rápidamente al baño mientras me sigue peleando, entro a la ducha esperando que el agua fría baje este mal genio y frustración que tengo, menos mal no me hizo ningún daño la porcelana rota, hace un semana me hizo una herida en la quijada, salgo del baño sin determinarla, me pongo una pantaloneta, una camiseta, tenis, prefiero salir a trotar que estar en este infierno, obviamente no podía faltar la retahíla por que iba a salir, salgo de la casa y me dispongo a trotar casi unos quince kilómetros como casi todos los días, en el camino voy pensando que voy hacer para mitigar esta situación, soy consciente que las cague, pero no supe en que momento le falle, si le fui infiel pero realmente amo a mi mujer, no se en que momento cometí ese error fatal hace tres meses, solo paso una vez y mas bruto yo que me vine a meter realmente con una niña, es una chica de dieciocho años que conocí trotando, según ella era virgen, pero no creo que una virgen se lo vaya a dar a un hombre en un monte, ahora no se que hacer, mi matrimonio cada día va empeorando, si cuento todo mi mujer es capaz de dejarme, aunque esta joven me busca insistidamente yo no quiero nada con ella, solo fue un acto hecho en mi peor momento, dude de mi amor y ahora estoy pagando la condena por no haber sido inteligente, nunca debí haber engañado a mi vida hermosa, llevo media hora trotando, voy por una vía nacional sin casas por mas de veinte kilómetros, me enceguece una luz, veo cada vez mas cerca el foco del automóvil, el miedo me invade, trato de salir de la carretera, auxilio.
Mario muere al ser atropellado por un conductor que se queda dormido al mando de una tractomula, en el funeral su esposa es encarada por la joven que manifiesta que ellos tenían planes de vivir juntos, nunca se va a saber la verdad pero el occiso queda como un estafador que tenia dos relaciones al mismo tiempo.
LORDWOLF WRITINGS
Mario muere al ser atropellado por un conductor que se queda dormido al mando de una tractomula, en el funeral su esposa es encarada por la joven que manifiesta que ellos tenían planes de vivir juntos, nunca se va a saber la verdad pero el occiso queda como un estafador que tenia dos relaciones al mismo tiempo.
LORDWOLF WRITINGS
Comentarios
Publicar un comentario