EL DOLOR DE LOS QUE SE QUEDAN ( RELATO )

 El llanto y la angustia ahoga esa sala ajena a la pareja,

sus familiares los miran con congoja,

el hombre con la mirada hacia el piso demostraba el dolor y la resignación por los golpes de la insensata vida,

la mujer comenta de que como es posible que todo lo hermoso que tenían se había desvanecido en un par meses,

todo por lo que habían luchado para tener materialmente se había esfumado,

gracias a los hijos de puta de los bancos  que no entendían la maldición por la cual estaba pasando su hogar,

su hermana la tranquiliza ofreciéndole su casa para que se queden ahí por unos meses mientras vuelven a encontrar su camino,

rechazando la petición con una premisa aterradora;

ya perdimos las ganas de vivir,

de levantarnos,

ya nada tiene sentido,

ese puto día se nos esfumó la existencia,

estamos aquí por nuestro cuerpo más no por nuestra alma,

sabíamos que iba a pasar pero teníamos la fe puesta en Dios que no sucediera,

y nos abandono,

nos dio la peor lección de la vida,

perder a alguien el cual se lleva tu alma cambiándola por un manojo de desidia,

 haciendo que perdamos todo lo material y quedemos completamente en la calle por reglas maricas de los bancos dónde la deuda no muere cuando el titular está en el más allá,

cómo esperaban que pagaríamos sus cuotas si el era nuestra alma,

cómo esperaban querer seguir trabajando si por el nos levantábamos todas las mañanas para conseguir el dinero,

pero bueno,

culpa de nosotros,

sabíamos que el lo iba hacer,

idiota nosotros que a pesar de las señales queríamos pensar que iba a durar un poco más,

ya no queremos vivir,

ya no tenemos casa,

ya no tenemos automóvil,

ya no tenemos dinero,

ya no tenemos fe,

ya no tenemos ilusión,

ya no tenemos esperanza,

ya no tenemos hijo,

ya no tenemos vida,

sin el ya no somos nada,

por el la vida era hermosa,

ahora solo es un bulto de problemas sin solución.